Sueño en
amarillo
el dulce
canto de la palabra hecha labio,
del tibio
sonido que acaricia el diente
del
significado que rechina en lengua,
que fluye
salivalmente de tu boca.
La letra
azul que clava en el rojo de mi alma
La palabra
amasijo del aire que exhala mi silencio
Pero el
sonido silabeado del viento
sólo susurra
un marrón de sombra
secuestrando
una a una las letras salvadoras
esas que
redimen a los vivos de sus yerros,
las mismas
que pronunciadas cauterizan el suspiro
haciéndolo
impermeable del grito que me persigue
(en cada
oscura noche del verano interminable)
Sueño en
amarillo
A la espera
siempre
Y sólo
recibo el ténue gris plomo
de la
palabra olvido.
1 comentario:
La tristeza tiene aquí un lugar tan hermoso que es muy posible que no lo quiera abandonar.
Judith, tu poema está sentado sobre esa silla, puedo verlo, tan claro como a mi soledad.
Bellas palabras y más aún.
Te felicito.
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