lunes, 5 de abril de 2010

Celebración, por Judith Márquez

Tengo urgencia de tu aura, carestía de tu voz, indigencia de tus pestañas Hambre de tus sueños, insuficiencia de tu andar, miseria de tus manos Privación de tus labios, pobreza de tu tiempo, aprieto de tu lágrima Penuria de tu hálito, parquedad de tu risa, apuro de tu vuelo. Ahogo de tu luz, estrechez de tus pensamientos, carencia de tu abrazo Ausencia de tu cuerpo; abstinencia de tu espacio. Y aún así, sin nada, desnuda y miserable en este andar de vuelo trunco. Canta el alma pregonando… paupérrima, famélica, aullando en la penumbra de mis horas Aquella, la misma, que acaricia tiernamente tu recuerdo para saciar sin pausa mis silencios.